La Amalfi no solo es eléctrica. Es eficiente, elegante y funcional. Tiene dos baterías removibles que podés cargar en cualquier enchufe. Sin estaciones especiales. Sin esperas. Sin excusas.

Es una moto que cuida tu bolsillo y el planeta. Sin aceite, sin humo, sin ruido. Con estilo, autonomía y tecnología.

Cambiás el sonido del motor por el silencio. La nafta por electricidad. Y el gasto por ahorro. No es solo movilidad. Es evolución sobre dos ruedas.